Eberth Munárriz
Lima, 1970. Administrador de empresas (UPSMP) y especialista en aprendizaje de idiomas. Se dedica a la capacitación de empresas. También miembro fundador de Claroscuro, promueve la literatura y prepara proyectos de difusión cultural. Es redactor de la revista Casa Nuestra (Angrafer Editores). Ha publicado el poemario colectivo Claroscuro. Poemas suyos han aparecido en revistas como Taller de Poesía (Tránsito Editores 2004), del taller de San Marcos, en la antología Encuentro de Escritores Nuevos (UCSUR 2004), donde la Universidad Científica del Sur reunió a los participantes del encuentro literario del mismo nombre, en After the Storm (USA 1996) y en otras publicaciones. Prepara la publicación de un poemario bilingüe La Guerra.
Regla Apolillada
los empuñadores de reglas
de papel
se han pasado toda la noche
desde su ocaso
golpeando el pupitre
desgastado
toda la noche
golpea y golpea
haciendo tanto ruido
sin consideración por los mortales
sin dejar oír
el grato silencio
de su noche
todas las estrellas se apagaron
y siguen golpeando
aun sin darse cuenta
que ya unos cuantos pájaros
anuncian
el comienzo
de una nueva mañana
El Hielo y El Hilo
tú dijiste
la felicidad se mide con un hilo
sí que es delgado ese hilo
e invisible
qué fácil es pesarle demasiado
justo cuando empezábamos a balancearnos
qué inevitable es encontrarnos con la sonrisa de la araña
al final de la caída
qué inexistente nuestra risa
frente al sonriente hoyo negro
cuan a la vuelta del segundo
interrumpiendo nuestro viaje
está el iceberg
presto a echar al fondo del océano nuestra copa levantada
y claro que este iceberg no es el de Pablo
éste es hielo de
+++++++++ verdad
que acecha nuestros barcos
+++++++++++++++++ ebrios o no
recordándonos que en nuestro viaje
por el agua corriente
el hielo ++ sí
quema
entonces cuan inútiles
++++++++++++ nuestras plumas
++++++++++++ nuestros lentes
++++++++++++ nuestros dedos desgastados
cuan tardías nuestras lágrimas
endoso tus palabras
+++++++++++++ se mide con un hilo
y qué terrible
que no podamos matar
+++++++++++++++++++++ a la araña
tú dijiste
la felicidad se mide con un hilo
sí que es delgado ese hilo
e invisible
qué fácil es pesarle demasiado
justo cuando empezábamos a balancearnos
qué inevitable es encontrarnos con la sonrisa de la araña
al final de la caída
qué inexistente nuestra risa
frente al sonriente hoyo negro
cuan a la vuelta del segundo
interrumpiendo nuestro viaje
está el iceberg
presto a echar al fondo del océano nuestra copa levantada
y claro que este iceberg no es el de Pablo
éste es hielo de
+++++++++ verdad
que acecha nuestros barcos
+++++++++++++++++ ebrios o no
recordándonos que en nuestro viaje
por el agua corriente
el hielo ++ sí
quema
entonces cuan inútiles
++++++++++++ nuestras plumas
++++++++++++ nuestros lentes
++++++++++++ nuestros dedos desgastados
cuan tardías nuestras lágrimas
endoso tus palabras
+++++++++++++ se mide con un hilo
y qué terrible
que no podamos matar
+++++++++++++++++++++ a la araña
(Inéditos)
Papeles
a fin de cuentas
en el mundo
hay tres papeles
el papel que doblado
en ochenta pedazos
es puesto en una charca
e intensamente soplado
también el papel con muchos
cuadraditos y signos extraños
que acaba siempre con una mancha
marrón arrugado en un tacho
por último el papel sin forma
específica ni color exacto
que por asfalto hierba piernas
o grava vuela impávido
pero nunca en cuenta
entre uno y otro hay un cuarto
el reverendo papel de
caminar incansable
y verter baldes de tinta en el aire
Historia Familiar
La familia toda sentada a la mesa.
Servida la cena.
Comen con placer sus anticuchos.
¿Quién no ha probado
El conspicuo plato nocturno?
Como todos saben,
puede muy bien ir con ají;
aunque, claro, arde
la lengua; y, más aún, arde
el estómago, y el hígado también.
Pero es frecuente acompañarlos de papas,
que pueden llenarnos de sabor a tierra,
mitigar los ardores
y mostrarnos los subsuelos más profundos.
En fin, la familia, nunca entera
en el mismo cuarto, siempre,
sólo unida en la cena,
ahora, devora con regusto
estos corazones puestos al fuego,
fuertemente macerados,
jugosos, con su ligero punto de sangre.
Terminada la cena,
bien por el peso de esta,
bien porque es hora de irse dormir,
se paran uno a uno y desfilan a descansar.
Ya postrados, uno por curiosidad pregunta…
Y se enteran todos que a falta de res
buenos fueron los corazones
de los abuelos –de ambas líneas–,
de algún hermano
y de un par de hijos.
–Con razón parecía que algo o alguien faltaba–
En la obscuridad,
después de un corto
silencio, sólo se distingue en sus ojos un brillo negro
manchado
de un fulgor rojiblanco.
(de Claroscuro, Círculo Abierto Editores, 2005)
6 Comments:
Creo que al principio es un poco difícil entender tu poesía, pero se nota un gran trabajo.
Quisiera saber si das talleres de poesía.
Gracias por los comentarios y lamento la demora en la respuesta; como lo habrás notado, he dedicado bastante tiempo al Homenaje a Eielson.
Estamos considerando programar unos talleres de escritura creativa. Puedes escribirnos al correo de Claroscuro (en contactos) para avisarte.
Saludos,
Eberth
Se ve mucha chamba pero creo que aún falta bastante
Tu poesía me gusta mucho, sobre todo la que habla de los empuñadores de reglas, eso es cierto, los jóvenes estamos cansados que simpre nos digan que hacer y por donde va el camino y no nos dejan, aunque con poesía como la tuya y actividades como las que realizas, estoy seguro que muy pronto nos tendrán que dar el timón.
Adelante amigo!! y que Claroscuro siga siempre así impulsando la literatura.
Un abrazo
Cesar
qué acaso solo Sandrita tiene los ojos (y los oídos) abiertos. trabajo? bah. talento bah!
acaso nadie te ha dicho que de interprete la haces mejor. dónde están tus amigos y su sinceridad cuándo más los necesitas.
John
El trabajo se nota, el talento también y cuando interpretas tu poesía lo haces muy bien.
No soy tu amiga, solo una admiradora del trabajo que tú y tus amigos hacen, no sólo con sus propios poemas, sino también con la cultura.
Me gustaría conocer a ese tal Jonh y ver su "trabajo" y que hace él a favor de la cultura.
Quisiera leer uno de tus poemas John ¿escribes??? donde has salido publicado??? a donde has sido invitado para "leer" tus poemas???
y por último quien eres???
Es fácil esconderse detrás del anonimato, quien habla así sólo habla por ignorancia o por celo y envidia.
Carmen Peje
este es mi correo si quieres responderme
caropequi@hotmail.com
yo si doy la cara
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